Barquisimeto, famosa por sus atardeceres de cielos rojizos, siempre ha sido una de las ciudades más tranquilas de Venezuela. Pero, debido al accionar de grupos de delincuentes, la inseguridad se ha apoderado de sus calles.
Al comenzar la Semana Santa, la influyente periodista, Erika Valladar, publica un informe denunciando que la Policía de Lara no tiene capacidad para investigar a fondo tantos asesinatos.
Forzado por la opinión pública, el comisario mayor ordena reabrir el emblemático caso de David Castillo, un joven que apareció misteriosamente acribillado al costado de la desolada carretera, que conduce al poblado de Duaca.
Pero reabrir el expediente de David, será como destapar la caja de Pandora. A partir de allí, cada rojo atardecer barquisimetano estará manchado de sangre y de muerte.
miércoles, 30 de julio de 2008
Publicado por Clau en 21:29
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